Gemma Barbany es CEO y cofundadora de Iaios. Una empresa que se dedica al textil sostenible. Gemma estuvo con sus productos exponiendo en BioCultura Madrid.
-¿Cómo surge la idea de echarte al ruedo del textil sostenible?
-Mi familia se dedica a la venta de productos textiles desde hace cinco generaciones. Yo he estudiado Bellas Artes pero estuve viviendo fuera durante mucho tiempo, en México, Alemania… Y, al volver, hablé con mi padre de recuperar el jersey de toda la vida. Recuperamos una marca que mi padre había registrado en los 90 y que había quedado en vía muerta. Recuperamos el logo y el concepto. Empezamos a trabajar en 2016 y en 2017 nos lanzamos con la primera colección…
DE LA CUNA A LA CUNA
-¿Nos puedes explicar qué diferencia a Iaios?
-Nuestras colecciones están formadas por jerseys con hilo 100% reciclado, reutilizado. Es decir, usamos retales de fábricas de confección. Lo que se tiraría. En Olot se separa por colores, se tritura y se vuelve a hacer el hilo. Muy importante: no hay tinte porque el retal ya tiene el color. Para conseguir un determinado color se mezclan diferentes fibras. Ahorramos uno de los pasos más contaminantes de la industria textil convencional. En Igualada, un taller familiar hace el tejido y se confeccionan los jerseys. Yo diseño y dirijo desde Granollers. Diseñamos sin botones ni cremalleras para facilitar la tarea del reciclaje posterior. “Cradle to cradle”. De la cuna a la cuna.
-Sí… Ese es un concepto genial. Ya hablamos de él en un monográfico de The Ecologist de hace unos años. En otro orden de cosas, ¿por qué te metiste en el mundo de lo ecológico, de lo reciclable, de la reutilización….?
-Pues porque tenía inquietudes en este sentido desde hace muchos años y porque mi padre siempre nos inculcó el concepto de sostenibilidad. Siempre ha sido un hombre muy activista y muy partidario de un consumo consciente. Amadeu Barbamy. Hicimos una prueba y, como salió tan bien, decidimos continuar. Para nosotros es muy importante el concepto de eco-nomía circular. Lo que hacemos es reciclado… y reciclable. Estas técnicas ya se utilizaban hace años. No hemos inventado nada, pero sí hemos recuperado algo que ya hacían otros ecoempresarios cuando no existía el término.
MODA SOSTENIBLE
-¿Cómo ves el sector?
-Hay una tendencia hacia la moda sostenible. Sobre todo, entre los jóvenes. Todo el mundo quiere más transparencia en todo. Cada vez más ciudadanos se dan cuenta de que las empresas y los políticos nos engañan. Y, aunque hablamos del mundo volátil de la moda, yo creo que esta tendencia ha venido para quedarse.
-Pero más de uno se aprovecha de la tendencia aportando muy poco que sea real y genuino…
-Así es. Las empresas multinacionales se lavan la cara e invierten en marketing “verde”, pero no tienen mucha consciencia. A veces hacen más mal que bien. Son empresas muy grandes que fabrican en talleres pequeños y aprietan y aprietan hasta la saciedad. Y esos talleres tienen que hacer inversiones para satisfacer pedidos cuantiosos y luego, si algo falla, se quedan con maquinaria inservible porque ya no pueden rebajar más los precios y las empresas se buscan otros proveedores. Son campañas que duran un mes y ¿luego qué pasa con todo eso? No es estable. No ayuda. Deberían ser campañas permanentes. De hecho, el formato de empresa transnacional ya no es sostenible de partida…
BIOCULTURA
-¿Qué significa para ti BioCultura?
-Es un referente total. Es una feria muy enfocada a todo lo ecológico hecha por gente que vive todo esto en primera persona. Ahora, la feria se abre más a la circularidad en lo textil y esto me parece muy bien. Porque no todo va a ser algodón ecológico de la noche a la mañana. El reciclaje, la reutilización… están muy bien. Es la primera vez que vengo. Estoy muy contenta con la experiencia.
-¿Por qué ese nombre?
-Iaios significa “abuelos” en catalán. Todo en nuestra empresa gira en torno al hecho de recuperar técnicas que utilizaban nuestros abuelos, pero también valores, una ética… A cada jersey le ponemos el nombre de un abuelo. A veces, son personas mayores que son muy famosas en todo el planeta porque han aportado algo importante a la Humanidad. En otras ocasiones son personajes anónimos que conocemos que tienen y representan valores importantes para nosotros.