Mikel Feijoo, SKFK, “Ser 100% sostenibles significaría dejar de producir. Nuestro objetivo es reducir al mínimo el impacto negativo”

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SKFK es uno de los mejores ejemplos de cómo una marca de moda convencional se puede convertir en sostenible. Ahora, son pioneros en temas de sostenibilidad y su caballo de batalla es reducir al mínimo las emisiones de carbono. Hablamos con Mikel Feijoo, responsable de la marca.

¿Cómo nació SKFK?

Yo vivía en Londres y compraba ropa de segunda mano para vender en el País Vasco y pagarme los viajes. Con el tiempo monté una tienda, traía cosas que aquí no había y nos fue bien. Después montamos una línea de camisetas y fuimos a los festivales a venderlas. Así fue cómo nació la marca.

¿No venías del mundo de la moda?

No, yo hice Geografía e Historia. Allá por el 91 empecé a traer ropa y en el año 96 saqué mi propia línea de camisetas, tres años después lancé una línea de moda completa. Era un estilo streetwear y encontró su hueco. Pero es una marca que ha ido evolucionando en estos 20 años de una manera notable. Después de 40 colecciones, para visibilizar esa evolución hemos hecho un cambio de nombre de Skunkfunk a SKFK. Queremos poner el foco en todas las acciones que estamos haciendo en términos de sostenibilidad.

¿Cuáles son esas acciones?

Creo que hemos sido ejemplo de transformación de una empresa de moda convencional a sostenible. Ahora queremos mostrar que también es posible como organizaciones empresariales y como individuos minimizar y compensar las emisiones de carbono.

¿Cómo lo estáis haciendo?

El primer paso fue saber cuáles eran nuestras emisiones de carbono, nos llevó 6 meses medirlas. Ahora tenemos una pauta para reducirlas en cada campaña. Medimos desde el transporte al trabajo, el transporte de mercancías, consumos energéticos de los 1.000 metros cuadrados que manejamos de superficie comercial, almacenes y línea de fabricación. Queremos conseguir reducir estas emisiones. Ya lo hicimos el año pasado y visibilizamos esa reducción en las prendas. Mediante una App puedes ver la cantidad de emisiones por prenda y la comparación con lo que hubiera supuesto hacerla de manera convencional. Queremos visibilizar que el consumidor tiene un poder que es el de elegir. Cada euro que gastamos está construyendo un mundo u otro.

¿Es responsabilidad de todos caminar hacia un mundo más sostenible?

Como empresario estoy un poco cansado de que todo el tiempo se ponga el dedo en el ojo a las empresas, cuando las empresas en realidad hacemos lo que el consumidor demanda. Si hay comida basura es porque hay gente que la come, si hay ropa basura es porque la gente la compra.

¿De cuánto fue la reducción que conseguisteis el año pasado?

Varía de unas prendas a otras, pero una media del 20%. Además, ahora toda la energía que consumimos es energía verde de Goiener (una cooperativa vasca) y el paso que estamos dando este año es la compensación. Lo que no podemos reducir, tratamos de compensarlo. Estoy seguro de que esto va a ser de imperativo legal de aquí a no mucho tiempo. Que cada empresa sepa cuáles son sus emisiones y que esté obligada a compensar por estas emisiones.

¿En qué momento decidiste dar el salto de la moda convencional a la moda sostenible?

Cuando fuimos a Asia en el 2003 y vimos cómo se producía, me llevé las manos a la cabeza. Decidimos cambiar, fue un proceso complejo: cambiar las fibras, los procesos, intentar cambiar la forma en la que trabajaban nuestras fábricas…

¿Qué fibras empleáis ahora?

Fibras unas cuantas, pero tejidos más de 60. Nosotros diseñamos muchos de nuestros tejidos para que puedan ser certificados sin que se nos escapen de precio.

¿Esos tejidos de que fibras están hechos?

Las fibras principales son algodón 100% orgánico, tencel que son celulosas de pulpa de madera; hemos utilizado hemp, lino, algodón reciclado, polyester reciclado, rami que es fibra de un tipo de ortiga.

¿Dónde producís?

La producción principal está hecha en China, India, Portugal y algo menos en España. Nosotros siempre decimos que lo importante no es dónde lo hagas sino cómo lo hagas. Por eso en que la certificación es lo que te da la credibilidad.

¿Pero no es contradictorio producir fuera si vuestro objetivo es reducir emisiones?

Tiene menos impacto de emisiones una prenda traída por barco de China, que una traída de Rumanía (que es Comunidad Europea) en camión.

Pero si la produjerais aquí las emisiones serían menores.

¿Pero los tejidos de dónde vienen?

Y ¿si consiguieseis obtener tejidos de aquí?

La gente no pagaría el precio. De hecho, hemos traído a BioCultura prendas a precio normal de colección y la gente nos dice que es muy caro… La ropa es un artículo de lujo, siempre lo ha sido. La de la moda es la cadena de valor más larga que existe, pero se ha llegado a convertir en un artículo de usar y tirar con el fast fashion. Ahora ¿quién está pagando el verdadero precio? No lo está pagando el consumidor, lo está pagando la cadena de valor.

¿Cómo ves el sector de la moda sostenible en España?

Es un sector en alza. Pero tiene todavía muy poco peso y aún encima hay mucha confusión sobre qué es sostenible y qué no es sostenible. Por eso a nosotros la certificación nos parece tan importante. Porque es una cadena de valor tan larga que es muy complicado hacer la trazabilidad por uno mismo, por eso necesitas a certificadoras que hagan ese trabajo.

¿Ves algo positivo en el hecho de que las grandes marcas del fast fashion ahora también saquen una línea ´bio’?

El único hecho positivo es que sube la demanda de fibras sostenibles. Pero no deja de ser un lavado de cara. Una empresa de fast fashion tendría que cambiar su modelo de negocio para ser sostenibles y eso no lo pueden hacer porque sería suicidarse.

Hay dos pensamientos: Los que consideran que es mejor utilizar lo que ya está fabricado porque es más sostenible que volver a generar nuevas prendas y después están aquellos que opinan que eso no es sostenible porque esas prendas no están hechas con tejidos orgánicos.

El plástico en sí no es malo, es el uso que se le dé después. Tú no te pones una chaqueta de polyester contra la piel, nosotros utilizamos el plástico en prendas exteriores. Y no seamos hipócritas porque nuestro día a día está lleno de plásticos. Nuestro objetivo no es ser 100% sostenibles porque eso sería dejar de producir. Nuestro objetivo es reducir al mínimo el impacto negativo y ese camino es infinito, pero nunca va a ser 100%. A nadie le hacen falta más prendas, a nadie le hace falta SKFK.

¿En qué país vedéis más?

Vendemos en treinta países, pero tiene más que ver con regiones que con estados. Por ejemplo, en Flandes vendemos mucho, en Cataluña, País Vasco, Bretaña, Normandía, en el área de Berlín y en el norte de California. Tiene que ver con el estilo, la renta per cápita, compradores más comprometidos… Aunque nuestros clientes nos compran porque les gusta nuestra ropa, la sostenibilidad es un plus para ellos.

Os diferenciáis de otras marcas de moda sostenible en que el diseño es una parte importante en vuestras prendas

Es una parte esencial. Y es lo que augurará el éxito de la moda sostenible, que sea moda. Hay ciertas personas que tienen una necesidad de vestir con prendas más amigables para la piel, pero la moda es algo más que eso. Es un tema aspiracional, emocional…

También ofrecéis la opción de alquilar vuestra ropa.

Sí, se llama SKFK circular closet. Hay cosas que te gustaría poner, pero sabes que las vas a vestir dos veces al año. Creemos que es una parte del futuro de la moda y hemos apostado por ahí.

SANTI MALLORQUÍ, ORGANIC COTTON COLOURS, “Hay marcas que utilizan plástico reciclado porque les sale al precio de la moda convencional y pueden decir que son verdes”

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Organic Cottons Colours fue una de las primeras empresas en apostar por la moda sostenible en nuestro país. Ahora, además de marca son proveedores de tejido e hilo. El algodón y su proyecto social en Brasil son sus pilares. Acaban de lanzar OCC Market, una plataforma que une a pequeños diseñadores para que puedan adquirir tejidos orgánicos a precios competitivos. Hablamos con Santi Mallorquí, CEO de Organic Cotton Colours, que acaba de recibir el premio BioCultura.

¿Qué momento está viviendo el sector de la moda sostenible en España?

Nosotros tenemos dos visiones, una como marca y otra como proveedor. Es sano que no deje de salir trabajo como proveedor porque eso significa que van a salir cosas nuevas al mercado. Estamos en un momento de mucho crecimiento, hemos igualado la facturación del año pasado en los primeros tres meses de este año. Es muy bonito ver que hay creatividad y ganas por hacer cosas. Otro tema es saber si estos proyectos van a funcionar y cómo se van a posicionar en el mercado, que no es fácil.

Como marca nosotros tenemos un cliente muy exigente, busca algo muy puro y específico y hay pocas marcas que hagan esto, por no decir casi ninguna. Estamos incrementando ventas, pero no en la medida de como proveedores.

¿Ves entonces que hay mayor crecimiento de emprendedores que quieren apostar por montar una marca de moda sostenible y no un crecimiento tan grande entre los compradores?

Una persona que empieza ahora en el mundo de la moda tiene que pensar así, no hay otra manera. Si quieres introducirte en un sector tienes que vislumbrar que es lo que va a venir, porque sino ya estás atrasado. Ahora bien, hay que separar entre los que saben lo que esto significa y los que piensan que esto es una tendencia y esperan continuar ofreciendo moda al mismo precio.

¿Hay confusión?

Hay muchas marcas que aún se piensan que el futuro inmediato es producir en base a reciclar plásticos. Pero el plástico reciclado es plástico que genera microplásticos en mayor medida que el plástico puro. Contribuyen a que el consumidor piense que por tratarse de plástico que viene de los océanos no le va a hacer daño al planeta.

Ellos argumentan que es plástico que ya se ha producido y el reciclarlo es una forma de volverlo a meter en la cadena de manera que no se convierta en un residuo.

Hay mucha gente que cree que los coches eléctricos son muy verdes, tienen una parte que sí, pero otra no. Hoy en día ya se sabe que los coches eléctricos no van a representar el futuro de la movilidad. El caso del plástico es parecido. Hay marcas que utilizan plástico reciclado porque les sale al mismo precio que producir en convencional, pero esto les permite decir que son verdes. Es el negocio perfecto porque al mismo precio, consiguen ser verdes.

También hay quien arguye que vestir plástico no es saludable.

No estamos consumiendo orgánico solo por el Planeta o solo por la cadena de producción, que también, la salud del destinatario final no se está teniendo en cuenta. Parece que no nos afecte la ropa. Sí lo que comemos, sí la cosmética, pero la ropa no… Nuestra empresa se basa en primera instancia en hacer algo bueno para el consumidor final.

¿Hay algún estudio que explique las consecuencias que puede tener el vestir plásticos?

Comienza a haber estudios. Sobre todo, en ropa deportiva, de como actúan las prendas hechas con plástico con el sudor sobre nuestra piel. Lo primero que tenemos que hacer es cambiar la legislación para prohibir utilizar tanto plástico, pero tenemos que dar alternativas reales para poder substituir este plástico. La filosofía de Ecoembes de consume plástico que nosotros lo reciclamos no sirve.

Lo difícil es que el mensaje llegue a la gente que activamente no lo busca, ya que el mensaje que le está llegando es el de las grandes cadenas.

Si tu te compras un artículo que supuestamente es verde en una gran marca y lo has hecho porque es verde, vas a comentar con tus allegados qué ha motivado tu compra. Cuando hagas esto alguien te va a salir al debate. Si lo hubieras comprado, aunque no fuesa verde, significa que eres un cliente que aún está verde y tiene que hacer su camino, como todo el mundo.

¿Cómo ves tú la situación de España en comparación con otros países?

Está claro que Europa nos lleva ventaja. Las nuevas generaciones están muy por encima de las leyes reales que tenemos en este país. En países del norte se rebaja impuestos a aquellos que reciclan correctamente y aquí estamos con Ecoembes que no hace su trabajo.

¿Vendéis fuera de España?

Vendemos el 55% a otros países. En Ámsterdam, Bélgica, Alemania tenemos representantes. Como marca no hemos potenciado la exportación de nuestros artículos a través de tiendas, pero sí que vendemos online al usuario final. La realidad es que vendemos más en España que en Cataluña y más fuera que en España.

Sois pioneros haciendo moda sostenible.

Hace 25 años la moda sostenible no era tendencia. Hoy en día eso está cambiando y eso nos está dando un auge importante. No obstante, nunca perderemos de vista quién nos compró desde el inicio. Y eran personas que fisiológicamente necesitaban estos tejidos puros. Esta gente no solo sigue existiendo, sino que aumenta. Cada vez hay más casos de psoriasis, alergias de piel, dermatitis, electro sensibilidad…

¿Cómo nació Organic Cotton Colours?

Angel Sainz empezó el proyecto en el 92, yo cogí sus frutos hace 8 años intentando seguir la misma filosofía.

¿Cómo llegaste tú a Organic Cotton Colours?

Tenía un blog para divulgar ecotendencia que se llamaba cooliflower. Quise vender camisetas a través de ese blog y eso me dio pie a conocer a Ángel y a Organic Cotton Colours y a producir estas camisetas con él. Pasé a estar 3 años con él. Ángel no veía continuidad en lo que había hecho y yo encontré la horma del zapato que me faltaba para dedicarme en cuerpo y alma a esta causa en un sector que desconocía. Yo no vengo del sector textil y por lo tanto ha sido muy motivador. Cuando llegas a un sector nuevo es bueno porque no tienes ciertos prejuicios para cambiar las cosas y es lo que hemos hecho. Dando facilidades para que junto con otras marcas se produzca un cambio.

Cultiváis el algodón en Brasil.

Sí, solo admitimos cultivos familiares, que tengan los cultivos en propiedad que estos cultivos no excedan una hectárea, no queremos grandes agricultores y solo aceptamos agricultores que cultiven de manera agroecológica. Es decir, que planten alimentos además de algodón en esta hectárea en propiedad.

¿Y cómo lo controláis?

Estando en el terreno. Tenemos una filial creada allí, hay una persona que se encarga de hacer toda la comunicación con los agricultores. Estamos en contacto con distintas asociaciones y grupos de agricultores en tres estados.

Nosotros no solo compramos algodón, sino que contratamos agricultores. Una vez forman parte del proyecto es infinita la relación que establecemos con ellos. Es decir, nosotros nos comprometemos a comprar todo el algodón que puedan producir cada año a un precio pactado.

¿Y si no consiguieseis darle salida a todo ese algodón?

Podemos hacer esto porque tenemos otro origen de algodón que es Turquía. El trabajo es nuestro de nunca exceder nuestras necesidades para que no nos salga por las orejas. Tenemos una propia bolsa interna que fluctúan los precios, nosotros no vamos a estar dispuestos a vender hilo a un precio muy bajo cuando tenemos demanda para vender tejidos o prendas acabadas. Pero si tenemos mucho algodón abrimos y bajamos los precios del hilo. Al final es el natural thinking. Solo podemos obtener algodón una vez al año y nunca sabemos cuánto porque depende de la lluvia. En función de eso le damos salida y priorizamos: Primero nuestra propia marca, luego producir para otros, después crear tejidos y en última instancia hilos.

“OCC Market es una plataforma que permite a pequeños diseñadores comprar un metro de tela a precios competitivos”

¿Qué es OCC Market?

Una plataforma digital orientada a diseñadores independientes. Todas las pequeñas marcas tienen los mismos problemas. El primero es encontrar tejidos orgánicos y el segundo el precio que tienen que pagar por estos tejidos. Esta plataforma lee los deseos de esta gente para convertirlos en propuestas. Cuando la propuesta recibe el suficiente apoyo de distintos usuarios producimos el tejido que necesitan. Al hacer esto, nosotros podemos ofrecer unos precios muy competitivos. De manera que puedan pedir un metro a un precio tan competitivo como el de una gran marca que compra 400.

Vosotros que sois productores de fibra e hilo, ¿alguna gran marca se puso en contacto con vosotros?

Muchas. Pero también he cogido experiencia y ya no me hace tanta ilusión. Nuestra realidad está tan distante de la suya en términos como condiciones de pago, cantidades, disponibilidad, filosofía de trabajo y necesidades son muy diferentes… Es preferible crecer de una manera orgánica, creo que hay vivir más tranquilos y saborear la evolución de la empresa en consonancia con su filosofía.

Ahora que las grandes marcas también se suman a lo eco. ¿Cómo diferenciaros?

La gran disyuntiva que encuentran las pequeñas empresas es que tiene que invertir dinero en dar información que no mejora el artículo que ofrecen. OCC Guarantee (Turquía) tiene la certificación GOTS que OCC Esentials (Brasil) no. Adquirir esta certificación supondría un extracoste sobre el coste que tiene, que ya es más elevado, y lo haría todavía más inaccesible. Sinceramente, quien no se crea lo que estamos haciendo en Brasil que compre lo de Turquía. Yo si tengo que aconsejar en términos de impacto social y medioambiental aconsejaría Brasil, tenemos unos términos mucho más elevados de lo que exige GOTS. Es por eso que creamos nuestra propia certificación.

“No creo que se audite igual a una industria textil de Japón, España o Portugal que a una de China, Pakistán o India”

¿Pero no crees que para el consumidor es difícil diferenciar al haber tantos certificados?

No hay legislación mundial del cultivo y procesamiento de los cultivos de tejidos como sí que hay en el sector de la alimentación. El textil no funciona así, tenemos un montón de certificaciones. Lo que puedo sugerir al cliente es que rasque un poco. Trate de inmiscuirse un poco en la filosofía de la empresa, conocer qué hacen… y luego valorar si le merece la pena o no. Lo fácil es ir al tienes o no tienes sello. Pero la realidad es que yo he estado en India y en muchos países que tienen sello y lo que he visto detrás no me ha gustado. No creo que se valore igual el sello si auditas a una empresa en Japón en España o en Portugal que si lo haces en China en Pakistán o en India…

Marcas de complementos sostenibles en Biocultura Madrid 2019

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La feria Biocultura Madrid 2019 está a la vuelta de la esquina. Del 7 al 10 de noviembre, en IFEMA, más de 400 expositores relacionados con el consumo ecológico, ético y responsable se darán cita en la mayor feria de España especializada en visibilizar a las empresas que promueven un cambio en nuestra forma de producir y comprar.

Después de haber recorrido los stands de moda infantil, calzado y joyería, hoy hablamos de los stands de moda que encontraremos en la feria recopilando aquellos centrados en el diseño de complementos: bolsos, bisutería, sombreros y gafas de sol son algunas de las cosas que encontrareis en las mesas de estas empresas.

AITOR BASTARRIKAhttp://www.aitorbastarrika.com/
Tejidos teñidos con tintes naturales: seda, lino, lana y algodón. Calcetines de algodón orgánico y lana teñidos con tintes naturales, fulares, chales, turbantes, gorros, etc.

BENETTI BARCELONAhttps://www.benettibarcelona.com/ (En la imagen)
Artesanos, emprendedores y diseñadores y productores de mochilas y cartucheras en sargas 100% algodón y materiales biodegradables.

BPELLhttps://shop.bpellbarcelona.com/index.php
Los productos de Bpell están elaborados con los retales que les sobran a los grandes fabricantes de nuestro país, principalmente pieles de oveja y vaca. La única condición para reciclar un material es que la piel haya sido curtida en nuestro país.

CARRETERA Y MANTA
En el stand de carretera y manta encontraremos calcetería fina, paños y boinas… complementos que viajan contigo y que están elaborados con lana merina en la Sierra de la Demanda.

HUGANA SOMBREROS NAT
Esta marca barcelones llava más de  15 años creando sombreros de paja, algodón y lino en gran variedad de modelos y tallas. También ofrecen una selección de sombreros de paja toquilla provenientes de Ecuador denominados Panamás.

KARAMBA
Diseño integral con botones.

OLE K’ARTEhttp://olekarte.blogspot.com/
Creaciones en seda pintada de fulares, cuellos, boinas, guantes, complementos…

OQUENNA BARCELONAhttps://www.facebook.com/Oquenna/
Artesana profesional en manufactura de objetos y complementos textiles.

SOLER BAGhttps://www.solerbags.com/
Una empresa de tradición familiar, fundada en 1880 y actualmente regentada por la cuarta generación. Diseñan y favbrican bolsos y accesorios que venden dentro y fuera de España.

Joyería ética en Biocultura Madrid

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Del 7 al 10 de noviembre, en IFEMA,  se celebra la 35ª edición de Biocultura Madrid, la feria nacional más importante de productos ecológicos y consumo responsable. Por supuesto, Planeta Moda no faltará a la cita con un  stand propio, organizando actividades durante la feria y apoyando a los creadores de moda sostenible.

Después de presentaros a los fabricantes de moda infantil y calzado, hoy conoceremos un poco más a los productores de joyas que ocuparán los stands durante la feria.

KIMUwww.kimuceramica.com
Elementos decorativos elaborados en cerámica caracterizados por reproducir runas, arte medieval, celta, románica y gótica, simbología antigua y contemporánea, signos del zodíaco, huellas de animales, siluetas de aves, icnitas de dinosaurios…

HIERBA DORADA – www.veranavarro.es
El equipo de Vera Navarro utiliza  ‘oro vegetal’ una planta brasileña llamada Capim Dourado que posee el color del metal de forma natural. Acompañan las fibras secas de piedras preciosas, cristales o cuero para crear pendientes, pulseras y collares.

DISEÑOS POLCAN
En Diseños Polcan son artesanos de la orfebrería. Diseñan piezas únicas terminadas una a una teniendo en cuenta la belleza de las gemas, sus formas y colores. Las piezas están realizadas en metales nobles, como la plata y el bronce.

NURI DEL RIO – http://nuridelrio.blogspot.com/
Artesana especialista en plata de 1ª ley, material que combina con cobre, bronce, óxidos , pátinas y piedras preciosas y semipreciosas como ónix, turquesas o ágatas.

ÁMBAR DE POLONIA
Joyas elaboradas en playa de ley y ámbar polaco, principal productor mundial de esta apreciada resina. El ámbar es una resina fósil de coníferas de 50 millones de años de antigüedad con propiedades terapéuticas y protectoras.

ANILLARTE – https://anillarte.com/ (En la imagen)
Joyas artesanas basadas en la libertad y en la belleza de las imperfecciones. Todo su trabajo está hecho a mano, en plata y piedras semipreciosas labradas de forma 100% artesanal. Los diseños son robustos a la par que bohemios y están inspirados en lis indios norteamericanos navajos.

KORTEZA – https://korteza.org/
Diseño y confección artesanal de complementos y bisutería elaborados en corcho textil, como alternativa vegana a la piel animal. Además de bisutería y complementos en su stand también encontraremos objetos de decoración, como lámparas, cajas o figuras elaboradfas a partir de bloques de corcho brutos tallados.

MISTURA ESMALTE 
Joyas de diseño propio decoradas con esmalte al fuego. Especialistas en mandalas.

TICSILVER
Pulseras, pendientes, broches, colgantes, anillos y brazaletes inspirados en las filigranas cordobesas y elaborados en plata 925 certificada. También realizan piezas en madera, como pulseras y relojes personalizables.

ANITHA MOL
Joyería natural

Nuria Sacristán (Lalita): ‘El principal reto para una marca de moda sostenible es la competencia’

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Nuria Sacristán nació y creció en Barcelona, aunque reconoce que nunca se ha sentido atada a un lugar. Se define como una persona libre, que mantengo ante todo un compromiso ‘con mi vida, con mi desarrollo personal y la evolución de mi alma’, mientras desarrolla su carrera como diseñadora y creadora de sus propios diseños de moda, con lo que se declara ‘profundamente feliz y afortunada’.

Sus prendas son ediciones únicas y está elaboradas a partir de tejidos rescatados de excedentes de fábricas. Podremos disfrutarlos durante BioCultura Madrid, del 7, 8, 9 y 10 de Noviembre de 2019 en IFEMA.

¿Cómo surgió Lalita?
Lalita nació hace 16 años después de una gran experiencia en India. Cosía desde niña, pero al regresar de este viaje empecé a vender mis creaciones. Lalita era el nombre que mi profesor de música clásica me puso en India. Significa madre y tierra. En ese momento fue cuando Lalita cobró vida. La marca es mi forma de expresar al mundo quien soy, cuales son mis valores. Expreso en cada pieza algo sobre mi alma y mi corazón.

Como diseñadora y usuaria, ¿qué es para ti la moda? ¿y la moda sostenible?
Honestamente yo nunca he seguido la moda, simplemente porque no lo he sentido. Puedo inspirarme, pero creo que cada uno debería vestirse de acuerdo a quien es, que la ropa sea una manifestación creativa de quién eres. Para mí la moda sostenible es aquella que respeta los valores humanos,  respeta el medio ambiente utilizando tejidos naturales y apoya un consumo responsable. De alguna forma volver a lo de antes, comprar poco y comprar bien.

¿Cómo nace la idea de hacer un proyecto que involucra sostenibilidad y ediciones limitadas?
Utilizo tejidos lo más naturales posibles y sobre todo que sean restos de stocks de fábricas. Cuando se hacen ediciones limitadas buscas que la mujer reconecte con su autenticidad, que sepa que es especial, que es única y que esa prenda que va a llevar también lo es.

¿Cuáles son los principales retos para una emprendedora de moda sostenible? ¿Cómo los resuelves?
El principal reto para una marca de moda sostenible es la competencia, y lo resolvemos confiando en que lo que hacemos es algo diferente, único y sobre todo vivo. Para mí los valores de marca es lo que nos hace diferentes, y ese es el gran motor y el gran reto también. Pues implica un mayor coste, pero seguir trabajando por un mundo mejor, en el que se priorizan los valores humanos y el respeto por el medioambiente. Potenciando la economía local y el consumo responsable.

Es evidente que la producción sostenible de prendas de vestir tiene beneficios en el medio ambiente y los trabajadores, pero ¿cuáles son los beneficios para el consumidor?
Los beneficios para el consumidor es tomar conciencia sobre una nueva forma de consumo, comprando productos locales que respetan los valores humanos y el medioambiente. Otro beneficio es que favorece la economía local. Llevará prendas que son únicas y no las va a llevar todo el mundo, como sucede con las grandes marcas. Y entre todos empezamos a recuperar el valor de las cosas.

¿Es esta la primera vez que asistes a Biocultura? ¿Qué esperas obtener de tu participación en la feria?
Es la primera vez que participo en Biocultura. Espero poder tener una buena respuesta de las personas con respecto a mi proyecto, que les guste y que se sientan identificados con Lalita. Y sobre todo ver en las personas una mayor conciencia con respeto a la vida.

¿Qué podremos encontrar en el stand de Lalita?
En el stand de Lalita podréis encontrar una marca de ropa casual femenina que está viva, con estilo propio, ropa para mujeres bellas, fuertes, femeninas, con energía, que saben disfrutar de la vida, y que se aman. Ropa hecha en Barcelona, cuidando el detalle y pensando siempre en ti. Una marca de ropa con valores y que ama lo que hace.

Moda infantil en BioCultura Madrid 2019

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Del 7 al 10 de noviembre abrirá sus puertas la 35ª edición de la feria Biocultura Madrid, la mayor muestra española de productos ecológicos y consumo responsable. En Biocultura Madrid podremos encontrar stands y actividades de alimentación, cosmética, limpieza, artesanía, música, turismo y así hasta 700 entidades que exhibirán sus propuestas durante tres días.

Por supuesto, el textil y la moda también tendrán su espacio durante la feria. En total, 62  mostradores de empresas que quieren vestirnos de forma sostenible. Tendremos la oportunidad de conocer a artesanos, descubrir nuevos materiales ecológicos y llevarnos a casa prendas bonitas, pero sobre todo, respetuosas con el medio ambiente y los humanos que los fabrican.

Estas son las marcas de moda infantil que contarán con un stand en la próxima feria:

Kurmi Kids
Kurmi es una marca de ropa infantil sostenible que utiliza tejidos orgánicos y libres de tóxicos para crear sus diseños, sin renunciar a los estampados y el estilo colorista. Confeccionan ropa para bebés y niños de hasta 4 años y ofrecen la posibilidade de personalizar las prendas con nombres, frases o dibujos.

By mami – https://bymami.com/
By Mami es el proyecto personal de Medi Mewes, quien busca que cada una de sus prendas hechas a mano con amor nos conecten con sentmientos, sensaciones y recuerdos felices. Utiliza tejidos orgánicos y en su catálogo encontraremos ropa, pero también pañales, accesorios de lactancia y hasta una sección de mercería, donde adquirir productos para confeccionar nuestras propias prendas de forma sostenible.

Mon Badabadoc – www.monbadabadoc.com
Mon Badabadoc es una marca de ropa para niños y niñas de 0 a 8 años. Sus diseños, pensados para que los pequeños se sientan cómodos explorando el mundo, son divertidos y coloristas. Producen únicamente con tejidos de proximidad y de forma artesanal en su taller de Barcelona.

Akukuna – https://akukuna.com/
Akukuna trabaja con tejidos ecológicos certificados con GOTS, libres de pesticidas y productos químicos tóxicos y todos ello de comercio justo y sostenible. Además, también trabajan para crear una colección atemporal y aestacional, con elementos de patronaje innovadores que les confieren un carácter muy versátil.